Intereses y Estado de Flow:
El concepto de Flow, propuesto por Mihaly Csikszentmihalyi, explica ese estado mental en el que estamos completamente concentradas/os, disfrutamos del proceso y el tiempo parece desaparecer. El Flow no surge necesariamente de la “pasión” o de un talento innato, sino de actividades que despiertan nuestro interés y que van generando disfrute a medida que avanzamos. Por eso es interesante observar qué actividades te conectan con esta sensación de fluidez, curiosidad y bienestar, aunque no sean “tu vocación definitiva” o algo para dedicarte profesionalmente.
Propósito y felicidad, Martin Seligman:
Martín Seligman, uno de los fundadores de la Psicología Positiva, propone que la felicidad no depende solo del placer o del éxito, sino de vivir experiencias con sentido y propósito. El propósito tiene que ver con aquello que aporta valor para ti y para el mundo, y eso puede estar presente incluso en momentos de crisis o cambio profesional. Es decir, puedes estar viviendo tu propósito ahora, aunque aún no tengas claridad sobre tu rumbo laboral. Desde esta mirada, el propósito no es un destino al que llegar, sino parte del camino.
El Elemento, Ken Robinson:
Ken Robinson plantea que El Elemento no es solamente aquello para lo que tienes talento, sino lo que ocurre cuando tu talento se conecta con algo que disfrutas, te inspira y te permite sentir que eres tú. El Elemento no está determinado desde la infancia, ni aparece como una revelación mágica, sino que puede descubrirse a cualquier edad, explorando intereses, experiencias y posibilidades nuevas. Esta idea ayuda muchísimo a desmontar la presión de “tener que haber nacido para algo” o de que si no lo descubriste de pequeño/a, “ya es tarde”.